viernes, 9 de julio de 2010

Alicia II

caminábamos rozando nuestros dedos nuevamente sentí un extraño deja vu en mi cuerpo, mis manos frías iban siendo tentadas por las tuyas, caminábamos siguiendo nuestros fríos pasos que lentamente se acercaban al final del destino, ella solo suspiraba al iniciar e incompletar sus frases, me dijo "tengo pena de decirte algo" solo podía responder "se valiente, después de la pena ya no existe nada" seguimos caminando ella tomaba valor al mismo tiempo que su mente la derrumbaba, ella estaba deseoso por sacar sus sentimientos mas profundos y sinceros, titubeaba al hablar y se tapaba el rostro con vergüenza, era tan linda con aquellas expresiones, suspiro como el susurro del viento "me gustas", solo voltee a mirar su cara cabizbaja y sonrojada, era tan linda en esa forma, seguimos caminando como si no hubiera pasado nada, al instante de unos segundos sin cambiar la vista al frente de dije "tu también me gustas" ella dejo de caminar me veía con aquellos ojos apenados, "no es cierto" se dijo a ella misma, solo sonreí y seguí caminando nuestro destino ya estaba a tan solo unos metros, ella no camino, se quedo quieta, inmóvil y su mirada decía algo mas, siguió caminando evitando nuestro destino, ella quería seguir caminando, y así fue, la seguí mientras ella veía el suelo, y caminaba cada vez mas despacio, quería disfrutar aquella caminata por ella, un minuto de silencio nos inundo y mis pensamientos solo decían una cosa... hablo de nuevo susurrando "quiero hacer algo pero me da pena", no creo que después de superar el miedo anterior sigas con pena le conteste, ella solo me miro fijamente, sus ojos grises me miraban lentamente, ella pensaba lo mismo que yo, pero no podía decirlo, solo nos quedamos quietos y no dijimos nada, cerré mis ojos y me acerque lentamente, ella me imito y el tiempo se detuvo, las demás personas no parecían importar, solo escuchaba el latido de su corazón latente, y el suspirar en su aliento, su delicada mano que rodeaba mi rostro y nuestros labios perdurando en un inmenso y delicado beso, que significaba todo en aquel instante, lentamente el ruido alrededor volvía lentamente a hacer escándalo, nuestros labios se separaban y nuestros ojos se entreabrían, aquel beso que detuvo el tiempo y se sentía como algo divino solo significaba que realmente era atracción mutua, me sentí feliz de haberme declarado al igual que ella, y solo surgen dos deseos, quisiera haber sabido nuestros sentimientos antes, mucho antes, y quisiera que estos últimos días acá este ella a mi lado, realmente lo deseo...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hay que bonito!!!


ya pues U.U


cuidate y sigue siendo feliz

:D